La mayoría de las personas disfrutan de una deliciosa pasta, ¿quizás tu gato también la podría disfrutar?
Más allá de las adorables imágenes de Garfield devorando montañas de lasaña, llevar esa lógica a la vida real puede no ser lo mejor para nuestro felino.
Los gatos son carnívoros obligados, lo que significa que obtienen su energía principalmente de proteínas animales y grasas.
Los carbohidratos, a diferencia de en las dietas humanas o caninas, no son necesarios para los felinos y pueden incluso causar problemas en su tracto digestivo.
Ciertamente, la pasta no es un alimento tóxico para los gatos, pero tampoco es el más propicio para su salud en términos de nutrición.
Para abordar este asunto desde una perspectiva completa, dividiremos el tema en una serie de subtítulos que nos permitan analizar en detalle los pros y contras de la pasta como alimento para gatos.
¿Qué contiene la pasta?
La receta tradicional de pasta incluye harina de trigo, huevo, agua y sal. Algunas variantes pueden contener arroz, lentejas, calabacín o frijoles, especialmente si se trata de pastas sin gluten.
Por tanto, la pasta es principalmente rica en carbohidratos. Cada 140 gramos de pasta proporciona los siguientes nutrientes:
- Calorías: 221
- Grasa: 1,3 gramos
- Sodio: 1 miligramo
- Fibra: 2,5 gramos
- Azúcar: 0,8 gramos
- Proteína: 8,1 gramos
¿Por qué los gatos no deberían comer pasta regularmente?
Los gatos en la naturaleza cazan y comen pequeños animales ricos en proteínas y moderados en grasas con apenas carbohidratos.
Por lo tanto, la dieta de un gato doméstico debería seguir un patrón similar. A continuación, se presenta la proporción óptima de nutrientes en la dieta de un gato:
| Nutriente | Cantidad recomendada |
|---|---|
| Proteína | Más del 50% |
| Grasa | Hasta el 20% |
| Carbohidratos | Menos del 3% |
Incluir pasta como una parte regular de la dieta de su gato podría llevar a un exceso de calorías y, debido a que el tracto digestivo del gato está diseñado para procesar proteínas y grasas (en moderación), una dieta llena de carbohidratos puede conducir a la obesidad.
Potenciales problemas de salud
La obesidad puede acortar significativamente la vida de su gato y conducir a otros problemas de salud. Además, el sistema digestivo del gato no puede descomponer el almidón en la pasta, lo que puede llevar a problemas gastrointestinales. Esto puede manifestarse como los siguientes síntomas:
- Vómitos
- Diarrea
- Malestar estomacal
Además, algunos gatos pueden tener reacciones alérgicas al gluten presente en la pasta. Nota: su gato puede ser alérgico, intolerante o sensible a los granos, lo que significa que no podrán procesar productos a base de plantas.
¿Qué pasa si mi gato come pasta con salsa?
Si su gato ha comido pasta con salsa, puede haber problemas adicionales. Algunos ingredientes comunes en las salsas son tóxicos para los gatos.
La mantequilla y el aceite de oliva pueden causar problemas gastrointestinales, y otros ingredientes de las salsas pueden ser más peligrosos, como el ajo y las cebollas, que son altamente tóxicos para los felinos.
¿Cuál es la alternativa más saludable?
Finalmente, si está buscando alimentar a su gato con una dieta saludable, considere mezclar alimentos húmedos y secos.
Elaborados con al menos 50% de proteína animal y hasta 20% de grasa, estos alimentos proporcionan a su gato la nutrición correcta. Además, siempre es importante consultar a su veterinario antes de realizar cambios significativos en la dieta de su gato.
En mi opinión
En mi experiencia trabajando como veterinario durante más de una década, he visto a muchas personas dando a sus gatos alimentos humanos, incluida la pasta. La mayoría de las veces, tratan de darle un gusto al gato sin pensar mucho en las consecuencias.
No es raro que los gatos muestren interés por los alimentos humanos y algunos pueden encontrar la pasta especialmente atractiva debido a su textura. Sin embargo, me gustaría enfatizar que, aunque un poco de pasta de vez en cuando no causará daño significativo, tenerla como una parte regular de la dieta de su gato podría resultar perjudicial.
He atendido casos de gatos que han desarrollado problemas de salud graves debido a dietas inapropiadas. La obesidad es una preocupación común y puede conducir a numerosas complicaciones para la salud de su gato, como diabetes, enfermedades cardíacas y artritis.
Por lo tanto, basado en mi experiencia, recomendaría fuertemente evitar dar pasta a su gato, especialmente si se trata de pasta con salsa.
No hay beneficio nutricional significativo, y los riesgos potenciales para la salud superan cualquier placer momentáneo que su gato pueda obtener al comer pasta. En su lugar, invierta en alimentos de alta calidad diseñados específicamente para gatos que satisfacen sus necesidades dietéticas únicas.
Como propietario de un gato, entiendo la tentación de complacer a nuestras mascotas con nuestros propios placeres culinarios. Pero como profesional del cuidado animal, debo recordarles que el mejor regalo que podemos darles es una larga, saludable y feliz vida. Y eso comienza con una nutrición adecuada.
Preguntas más frecuentes
¿Es segura la pasta para el consumo de los gatos?
Sí, la pasta es segura para los gatos siempre que se dé en moderación. La pasta no es tóxica para ellos. Sin embargo, los gatos son carnívoros y requieren nutrientes específicos que no se encuentran en la pasta. Darles demasiada pasta puede llevar a la desnutrición a largo plazo.
¿Puede la pasta ser beneficiosa para la dieta de un gato?
La pasta puede proporcionarles a los gatos una fuente de carbohidratos. Dicho esto, los gatos no requieren carbohidratos en su dieta. Los gatos necesitan una dieta rica en proteínas para mantener su buena salud, la cual es más fácil de obtener a través de alimentos específicamente diseñados para gatos que contienen la proporción correcta de nutrientes.
¿Qué tipos de pasta deben evitarse para un gato?
Debes evitar alimentar a tu gato con pasta que contenga ajo, cebolla o salsas con altos contenidos de sal y especias ya que estos condimentos pueden ser tóxicos para ellos. Además, nunca debes dar a tu gato pasta cruda porque puede ser difícil de digerir para ellos. Siempre cocina la pasta antes de dársela a tu gato y asegúrate de que esté fría antes de servirla.